Powered By Blogger

Friday, May 14, 2010

Carlos Varela: no sirvió de nada



Carlos Varela es, de cierto modo, un santo de falsa devoción. Por eso fui a verlo esta noche a SOB's.

SOB's es un sitio de buena fama y malos recuerdos al sur de Manhattan, en la esquina de Varick y Houston Street. El lugar tiene una acústica diabólica y precios caros para lo que sirven. Pero de algún modo es real. Hay algo tangible y hediondo que le dice a uno que el sitio es real. Y uno va... si no le queda más remedio. Esta noche, no me quedó más remedio.

Hacía casi diez años que no me aparecía por allí. La última vez fue la noche del 10 de septiembre de 2001. Había ido a encontrarme con mi hermana, que había venido de Cuba y a la que hacía dos años que no veía. Salimos de allí a las dos de la mañana del 11 de septiembre y, al cruzar el puente de la calle 59 que cantan Simon y Garfunkel, le dije que mirara la silueta de Manhattan, rematada al sur por las Torres Gemelas. Siete horas después de decirlo, las Torres Gemelas no exisitían. Se entiende que SOB's no es mi bar preferido.

Pero esta noche fui. Cantaba Carlos Varela. Alguien le dijo a MD anoche que Carlos Varela cantaba en Manhattan. Y fuimos a verlo.

El gnomo salió al escenario con media hora de retraso y una barba de dos días. Los gringos, por falta de imaginación, le dicen "el Bob Dylan de Cuba". Es una afirmación doblemente falsa. En primer lugar porque ya nadie es Bob Dylan —ni siquiera él mismo. En segundo lugar porque Silvio Rodríguez, mal que pese, sería lo más cercano al judío de Duluth. Pero la afirmación en este caso funcionó como una maldición: el audio no permitía descifrar lo que decía. Al principio, era como estar en un concierto de Bob Dylan, donde uno no entiende nada de lo que se dice en el escenario.

Las primeras dos canciones eran nuevas... no entendimos ni una palabra. Después habló Carlos Varela... tampoco se entendía. Entonces comenzó a cantar las canciones que uno se sabe de memoria y todo fue más llevadero.

MD salió a fumarse un cigarrillo y al regresar me dijo: "Me encontré con Rubén Blades". Me llevó hasta donde estaba y le hice una foto tomándose su mojito (la pueden ver en la página de las fotos que tomé en el concierto). Unos minutos más tarde, Carlos Varela lo llamó al escenario. Le dijo que fuera de una vez a la La Habana. Rubén, como disculpándose, le dijo: "Iré... a una Cuba libre". "Viva Cuba libre", gritó Varela al final de una canción, y los cubiches del público —inmensa mayoría— repitieron el grito.

La gente coreó "Memorias del subdesarrollo", "Como los peces" —que Varela dedicó a los balseros—, "Habáname" y "La polítia no cabe en la azucarera" —con improvisaciones de Rubén Blades. Cuando comenzó a cantar "Retrato de familia", sin embargo, se hizo un silencio sepulcral. Me imagino que en ese momento Varela se haya dado cuenta de que el público era enteramente suyo.

Carlos Varela, para los cubanos que andamos por la cuarentena, es el tipo que comparte nuestro escepticismo. Uno supone que la generación anterior —la de Silvio y Pablo y todos los demás—, alguna vez se creyó la revolución cubana. Pero Carlos Varela tenía 16 años, como tantos de nosotros, cuando se organizaron las turbas fascistas del Mariel. Si no es tonto —y no lo es— sabrá bien que los cubanos hemos vivido una gigantesca y perversa idiotez.

Para los que nos tocó esa experiencia, no importan mucho los malabarismos que Varela hace, como asi todo el mundo, con la verdad. Para nosotros es evidente que habla sabiendo "lo que hay". Y sus canciones revelan ese conocimiento. Es curioso que el público presente no hizo mucho caso a su petición de "un minuto de silencio" por los balseros muertos —que no sonó muy sincera—, ni a su grito de "Viva Cuba libre", pero aplaudió rabiosamente cuando cantó su conocido juicio final sobre esa revolución "que no sirvió de nada, de nada, de nada, o casi nada, que no es lo mismo pero es igual". Uno le cree a Carlos Varela cuando canta eso. Y coreando esos recuerdos se nos fue la noche. Gracias, gnomo.

Post data: Tomé una docena de fotos durante el concierto que pueden ver aquí.

15 comments:

  1. Gracias por la cronica:
    es sincera y esta bien escrita.
    Dos valores raros en el cenicero de nuestras emociones.
    No conocia tu blog.
    Un saludo desde Paris.
    Armando VALDES-ZAMORA

    ReplyDelete
  2. Muy buena crónica. Saludos desde Montevideo.
    Luis Casacó

    ReplyDelete
  3. Ti, cuanta saudade!!!
    Leyendo tu cronica volvi atrás 25 años en el tiempo.
    Un abrazo

    ReplyDelete
  4. "Teresita",
    muy buena crónica, no, excelente. Ya lo dije antes, eres un tipo muy inteligente.

    ReplyDelete
  5. Muy buena la crónica. Gracias y saludos.

    ReplyDelete
  6. Deliciosa lectura. ¡Gracias!
    j f

    ReplyDelete
  7. felicitaciones, bien escrito.. pienso lo msimo aunque estoy bien lejos de NY salud por la tierra!

    ReplyDelete
  8. amigo mio,como siempre,te agradezco que nos prestes tus ojos,creo que hubiera sentido lo mismo,pero igual me alegra que "alguien" le haya dicho a MD del concierto para no perdernos tu juicio,un abrazo,jcvalls

    ReplyDelete
  9. Jajajaja... queridisimo, K nunca te va a perdonar que la hayas reducido a alguien...
    Saludos,
    D.

    ReplyDelete
  10. Gracias...yo tambien estuve ahi. Despues de una espera de mas de 10 anios fui a ver a mi IDOLO, sin embargo no me fui con un sentimiento de plenitud como he experimentado en otros eventos de mi pais. Insatisfaccion indescriptible...un dulce amargor parecido al que senti al leer tu escrito...Aun asi, gracias Carlos por tus canciones que son el simbolo de nuestra generacion

    ReplyDelete
  11. Maria del Mar (seudonimo)May 19, 2010 at 7:32 PM

    Tu escribes que los cubiches repitieron (3ra persona del plural) el grito de "Viva Cuba libre" ?Tu no coreaste?.

    ReplyDelete
  12. No era el audio!!! No sé cuánto tiempo llevas fuera de La Siguaraya, pero es que uno ya no entienden lo que hablan. No vocalizan o, qué sé yo, será lo que quedó del hombre nuevo: un dialecto incomprensible. Yo he intentado ver alguna película cubana cuando la ponen en televisión, y cambio de canal porque no entiendo lo que dicen. Al final es un poco triste.

    ReplyDelete
  13. David, de que pelicula hablas? disculpame, pero quizas necesites un equipo nuevo...Por otra parte, tu fuistes a ver a Varela, estuvistes ahi? Al final, lo triste es la manera que te expresas de tu gente, bueno, eso si eres cubano...quizas nacistes aqui...pero nunca lo has sido...de ser asi tu comentario esta justificado...mis disculpas

    ReplyDelete
  14. Exelente! Especialmente porque todavia escucho aquellas canciones viejas como: Guillermo Tell, Jalisco Park y el resto de ese disco casi todo los dias...
    y hasta el momento me hace recordar La Habana como cuando vivia en ella.

    ReplyDelete
  15. Que buen post. Que sincero. Gracias,
    saludos,
    Eutelia
    www.albinovino.com

    ReplyDelete